MARTIROLOGIO ECUMÉNICO
Selección
Por
DR. ANÍBAL JOHNSON
Editorial
CULTURA
DEL ENCUENTRO
Puede publicarse:
S.E.R. CARD. VÍCTOR M. OSCULARIO
Sup. Gral. Dicasterio de la Doctrina de la Felicidad.
Dado en Roma, Agosto 2023.
Nota del editor:
Cumpliendo con lo establecido por la ley, un ejemplar
de este libro fue remitido a Su Esplendencia Sancho el Gobernador, pero hasta
el momento no se ha recibido el correspondiente acuse de recibo.
INDICE
SOBRE EL AUTOR
DEDICATORIA
PRÓLOGO DEL AUTOR A LA PRIMERA EDICIÓN EN ESPAÑOL
RECOMENDACIÓN PONTIFICIA, por Monseñor Panchampla.
PREFACIO ECUMÉNICO, por el Cardenal Helmuth González
del Pozo.
ENERO
Los seis santos Dialogantes.
San Carlosmaría Zubirá de Andarivel, confesor.
Beato Mr. Erwin Smith Passacaglia, mártir.
Beato Li-Chang-Po, confesor.
Beato Roberto de la Ortiga, confesor.
Santa Hillary Walsh, mártir.
FEBRERO
San Ananda Rupananda Qurwani, mártir.
Beata Carlota Holms de Botazzi, confesora.
Santa Marta Bergolia, virgen y confesora.
MARZO
San Rikhan, Premio Nobel de la Paz, mártir.
Beato Padre Silvestre Degastri, confesor.
San Mordejai Kaplan, rabino, mártir.
ABRIL
San Joao Gilberto Ribeiro da Fonseca, obispo, mártir.
Beato Jean-Luc Turronamur, confesor.
MAYO
Santa María Julia Albornoz de la Cueva, “Julita”,
mártir.
Beata Cintia Grundig, confesora
JUNIO
Beato Johnny Willcot, confesor.
Beato Pavorosso, confesor.
JULIO
Beata Celia Mecorro, pastora, confesora.
San Agustín Mire, Cardenal.
AGOSTO
Beato Hans Oppenheimeer, confesor.
SEPTIEMBRE
San Luisito Mangle, cardenal, confesor.
Alfredo Chozas, dirigente social.
OCTUBRE
San Jacob Mynster, confesor.
San Amílcar Rebolledo, mártir.
NOVIEMBRE
Beato Attar Salim Deaká, confesor.
Beata Venérea, confesora.
DICIEMBRE
San Anastasio Giles, mártir.
Beata Ester Lina Williams, obispa, confesora.
POSTFACIO, Por el Rabino Fernando Szegarkón.
SOBRE EL
AUTOR:
El Dr. Aníbal
Johnson es Doctor en Filosofía cuántica, Licenciado en Teología moderna por la
Universidad de Múnich y Catedrático de Historia de la Iglesia contemporánea del
College Ambrosian de Canelones, Uruguay. Ha formado parte de la Comisión
Preparatoria del Sínodo de la Sinodalidad de la Iglesia Sinodal y de la Comisión
Asesora de la Schola Ocurrentes. Es Doctor Honoris Causa de la Universidad de Joya
Rica. También es autor de diversos opúsculos acerca de la Democracia y la
gestión democrática eclesial, además de renombrado conferencista internacional.
Se desempeña actualmente como Sub-secretario de la
Secretaría de Fraternidad del Ministerio de Cultura de la Nación en Argentina.
Es socio vitalicio del Club San Lorenzo de Almagro,
donde tuvo el gusto de compartir tribuna y platea con el Papa Francisco.
Dedicatoria:
Al Sacrosanto Concilio
Vaticano II
Magna asamblea
Clave para un mundo más mejor.
Prólogo
del autor a la primera edición en español
Cuando el recordado Monseñor Duilio Bonetta –para mí simplemente el Padre Duilio-, en su carácter de Presidente de la Comisión Sinodal del Sínodo Sinodal Ecuménico de Roma, me convocó a su humilde y austera oficina en la Cittá Santa, sospechaba lo que se traía entre manos. Muy particularmente porque el día anterior su secretario el Padre Felici me confideció el santo proyecto del Obispo de Todos, como se lo conoce popularmente.
Verdad que el Padre Duilio me había hecho un habitué
de sus tertulias ecuménicas cuando ambos vivíamos en Buenos Aires, junto al
Rabino Kollman, por lo que iba a verlo ahora nublada la testa de cálidos
recuerdos.
Debo confesar que no poca dosis de temeridad –y de Tranquinol
250 mg- de mi parte, llevaron a que no pusiera pies en polvorosa, y en cambio aceptara
sin más el convite de llevar a cabo verdaderamente una labor faraónica, si se
me permite la expresión. Fiat voluntas
tua!, diría algún clérigo preconciliar, de esos que aún se escabullen
lastimosamente por la Santa Madre Iglesia. Este servidor prefiere evitar las
expresiones demodé y ser más
ecuménico en su lenguaje, de acuerdo a las directivas emanadas del Sínodo de la
Pastoral Sinodal por la Unidad. De modo que me dije: Okéy!
Así pues, luego de un caluroso abrazo, y de un rato de
charla amena y cordial en su humilde y austera oficina, Monseñor Bonetta me
acompañó hasta una mesa ovalada de cinco metros de largo por dos de ancho y uno
de alto (si mi memoria no me falla), sobre la cual se hallaban estacionados
prolijamente cincuenta volúmenes encuadernados en cuero rojo, de quinientas
páginas cada uno. El efecto todavía vigente del Tranquinol impidió que este
servidor retrocediese asustado en busca de la salida. Por el contrario,
Monseñor puso su bondadosa mano sobre mi hombro y me dio un pequeño impulso
hacia la mesa, agregando en tono ligero: “Todo
tuyo, che”.
No podía suponer yo entonces, a pesar de mi euforia
por los frutos esplendorosos de la primavera sinodal, que semejante cantidad de
mártires, beatos, santos y santas, poblasen ya el firmamento ecuménico. Pero
algo incognoscible en mí, algo periférico, en lo más recóndito de mi alma, me
invitó a tomar coraje –puede ser también el whisky que me había convidado
Monseñor Bonetta un momento antes- y a afrontar la obra de mi vida. Esta que
Ud., amable lector/a/e tiene ahora entre sus manos, la Selección del Martirologio Ecuménico para la Nueva Iglesia, versión
2023.
El trabajo de selección y dosificación fue emprendido,
a lo largo de un fin de semana largo en la isla de Capri, con la invalorable colaboración
de la Dra. Emilce Roulette, teóloga destacada del Instituto Vaticano de la
Mujer, del Prof. Enzo Mantecole, de la Universidad Estadual de Puerto Príncipe,
y de la Srta. Greta Mascavo del canal de televisión juvenil Hey Channel +. Supervisó
nuestra labor el Padre Murray Mungué, de la oficina de la Renovación
Carismática del Vaticano II, en orden a verificar que toda nuestra labor no se
ahumase en cualquier tipo de influencia retrógrada, anacrónica y atrabiliaria.
Nuestra consigna ha sido siempre “Promover la cultura del encuentro” y evitar
el Indietrismo. Modestamente, creo que lo hemos logrado.
Debido a la cantidad significativa de santas y santos
de la Nueva Iglesia, hemos optado por elegir los más populares, renombrados o
curiosos, tras realizar una jornada de elecciones democráticas en la oficina de
nuestra redacción. La mayoría, como se sabe, siempre tiene la razón. Con mucha
más razón en la Iglesia de todos, todas y todes.
Esperando que los lectores de habla española aprecien
nuestra ingente labor, realizada por amor a la Iglesia en salida y a la
Humanidad toda, me encomiendo a sus oraciones, o a sus buenas ondas para
aquellos que no crean. Este Martirologio es de Todos: Fratelli tutti!
Dr. Aníbal Johnson, PhC.D., ThM.D.
Recomendación
pontificia
Se transcribe a continuación parte sustancial del
discurso pronunciado por Monseñor Panchampla, Obispo auxiliar de Tolosa, en
representación del Secretario adjunto de la Secretaría de Estado Pontificia a
cargo del Cardenal Timothy Higgins. Fue durante la presentación del libro en el
Centro Cultural Beato Monseñor Angeletti en la Villa N° 14, Conurbano
Bonaerense, el 12 de marzo de 2023. Respetamos el estilo oral de Monseñor.
“Buenas tardes a todos y todas (aplausos)…Eeeehhh…Es con intenso placer que estoy acá, eeehhh…Para presentarles esta obra única que quedará, esteeee…en… los anales de las grandes obras sobre la santidad (aplausos)…Una santidad que…quiero destacarlo, no se limita o restringe a un grupo determinado de personas, de una exclusiva pertenencia eclesial… Porque como nos dice siempre Su Santidad Santísima: ¡No al exclusivismo! ¡Sí a una Iglesia de todos! ¡Todos adentro! (aplausos y vítores). ¡Todos, todos, todos! (vítores) Así pues, eeeehhhh, los frutos riquísimos de la apertura obrada por el Sacrosanto Concilio Vaticano II (aplausos) ven hoy su confirmación en esta obra que nos presenta los ejemplos que debemos imitar, para saber transitar en paz yyyy… con la sabiduría de la democracia, nuestra vida en la Casa Común (aplausos). La Iglesia mira siempre para adelante, y cuando mira hacia atrás, hacia sus santos, es para afirmar el camino irrevocable de poner en órbita total el Concilio Vaticano II (aplausos). Nuestra Iglesia es una Iglesia en salida, de acogida, cualquiera sea el color de piel o la orientación sexual, no tenemos derecho a discriminar a nadie (vítores y aplausos). Por eso hemos querido aprobar calurosamente esta iniciativa del Santísimo Padre para que nadie se sienta excluido en el reconocimiento de su lucha por un mundo más inclusivo, donde el Hombre sea el centro de toda iniciativa, y así puedan ser respetados sus derechos humanos y su altísima dignidad. Muchas gracias (aplausos y pedido de bises)”.
Prefacio
ecuménico
Por el
Cardenal Helmuth González del Pozo
Me complace presentar esta obra que celebra los frutos
sinodales en plena fraternidad con un mundo más justo, más sustentable, más
fraterno y más democrático. Los santos ya no son una propiedad exclusiva de un
sector que monopoliza sus virtudes, sino que son herencia de la humanidad toda,
sin discriminaciones.
Gracias a Dios, el Santísimo Padre, víctima
privilegiada del Espíritu Santo, ha puesto a la Iglesia a caminar, ha puesto a
la Iglesia en estado de escucha y diálogo, dejando atrás un oscuro y rígido pasado.
Los santos aquí invocados son ejemplo cabal de esta nueva actitud positiva y
festiva de cara a la vida. Ellos “han hecho lío”, por eso nosotros los
celebramos.
Por el contrario, quedan afuera de este impulso de
vida nueva de la Iglesia sinodal aquellos a los que el Santísimo Padre ha
sabido calificar muy bien, con su acostumbrada misericordia: son los elitistas
que quieren encerrarse en sí mismos para manipular el patrimonio que nos dejó
Jesús. Hablamos acá de los cristianos derrotados, con cara de pepinillos en
vinagre, los desgranadores de rosarios, los pelagianos, los lefebvrianos, los
restauracionistas, los que balconean la vida, los turistas existenciales que no
se dejan misericordear, los tiradores de la Inquisición, los indietristas, los
príncipes renacentistas de corazón agusanado, los cristianos rígidos e
inflexibles, etcétera.
Quiera el Altísimo hacer despertar a esos confundidos
nostálgicos y reaccionarios, apegados a un pasado que la Iglesia ya ha dejado para
siempre atrás.-
Mons. Helmuth González del Pozo
Secretariado para la Juventud
Comisión Interpastoral Ecuménica
Adjunto a Naciones Unidas.
ENERO
9- En Ad-Efesio, el nacimiento para el cielo de los
seis santos Dialogantes, a saber: Emilio, Obdulio, Nicasio, Pánfilo, Anfibio y
Farmacio, de la Comunidad Metropolita del Diálogo Ecuménico.
10-En Wellington Square, San Carlosmaría Zubirá de
Andarivel, confesor. Carlosmaría, Marqués de Olmos y Peras, nació en una
antigua y aristocrática familia española, vinculada al Marquesado de Bobón. Fundador
de la sociedad Opus Judei, con su amplio predicamento contribuyó como pocos al
encuentro con nuestros hermanos mayores, recibiendo el apelativo de “Númen del
Diálogo”. Su modestia era proverbial, y su amor apasionado al mundo hizo que no
tuviese enemigos, forjando así la imagen de la fraternidad universal tan cara a
los últimos sumos pontífices.
Se fue a la Casa del Altísimo durante una visita
pastoral a Inglaterra: luego de una visita al Rey Charles el III°, le asaltaron
vómitos, los cuales no pudo expeler con suficiente desenvoltura ya que estaba
siendo acompañado por la corte real rumbo a la limousine y prefirió disimular
su malestar. Entregó su alma dentro mismo del vehículo, con discreción, como
fue su vida enteramente diplomática.
Es el santo patrono de los diplomáticos y los
fabricantes de globos terráqueos.
14-En Durango, México, Beato Mr. Erwin Smith
Passacaglia, pastor de la Iglesia del Bienestar Universal, mártir. En confuso
episodio, recibió tres balazos en el trasero, luego de que platicase a una
madre de familia la Palabra del Señor. Agonizó penosamente en el dispensario
municipal de la colonia Juárez, ofreciendo sus dolores de trasero por la paz
universal. Se despidió de su mujer y de sus numerosos acreedores susurrando
“¡Aleluia!”, tras lo cual expiró. En su honor se bautizó un taco llamado “Mr.
Erwin”, que incluye tres chiles bien picosos.
16-En Jiao-Pei, China occidental, Beato Li-Chang-Po,
maestro budista zen, confesor. Su precario hogar fue presa de un voraz incendio,
se sospecha que iniciado al olvidar una moxa encendida sobre una estera de paja.
El maestro no quiso, sin embargo, traicionar su coherencia, aceptando que el
fuego era verdadero sólo para el que así lo quería, y él estaba dispuesto a
ignorarlo. Su indiferencia ante las llamas fue ejemplar. Su antiguo y esbelto
cuerpo quedó como un pollo rostizado. Al fin murió por mantener incólume sus
creencias. Su culto se extendió ampliamente por todo el continente asiático,
gracias a la red Tik-Tok. Muy especial es su culto en Persia, Libia y Yemen.
El mismo día, en Panamá, el Beato Roberto de la Ortiga,
confesor. Seguidor de San Ernesto de la Higuera (mártir en Bolivia), Roberto
abandonó una promisoria carrera como ingeniero plástico para lanzarse a luchar
por la liberación de los oprimidos. Fue perseguido a causa de la justicia
social. Luego de tomar de un banco dinero para los más necesitados, y
defenderse contra los represores uniformados, Roberto fue traicionado al querer
ingresar a una iglesia en busca de refugio, cayendo bajo las balas policiales.
Su fiesta se celebra al día siguiente, aniversario de la traslación de sus
reliquias a La Habana, Cuba.
29- En California, Santa Hillary Walsh, mártir. Actriz
de singular belleza, tras haber interpretado con unción a Juana de Arco en el
exitoso film de Jonathan Schwarz, murió quemada con querosén por un fanático,
mientras estampaba su mano en el Paseo de la Fama de Broadway. Son muy
recordadas sus últimas palabras: “Me quemo, la p… que lo parió”. Sus cenizas
fueron recogidas por sus fieles seguidores y dispersadas en diversos centros de
peregrinación de los Estados Unidos. Actualmente se filma su vida en la Meca
del cine.