Anécdota contada por el obispo norteamericano Fulton J.
Sheen (1895-1979):
«Iba a dar una conferencia cuando me perdí en las calles de Filadelfia. Entonces, me acerqué a un grupo de niños que estaban jugando, y les pregunté:
-¿Podéis decirme cómo se va al Ayuntamiento?
Uno de los mayores me lo indicó, preguntándome a su vez:
-¿Qué va a hacer allí?
-Voy a dar una conferencia.
-¿Sobre qué?
-Sobre el modo de ir al cielo. ¿Te gustaría oírla?
-¿Sobre el modo de ir al cielo? ¡Pero si ni siquiera sabe ir al Ayuntamiento!»