E. Mantecole. Prestigioso vaticanista.
De
paso por nuestro país, no tuvo prevenciones y escogió a nuestro blog como único
y exclusivo interlocutor. Quien ha tenido la gentileza es el prestigioso
vaticanista Enzo Mantecole, que
recientemente le hiciera una entrevista muy comentada a Francisco para el
prestigioso semanario “RAZÓN MATCH”.
De ese y otros temas dialogamos con el prestigioso vaticanista.
CRM: ¿Qué lo trajo a nuestro país?
Mantecole: El avión. Fue un vuelo con escala en
San Pablo, no estoy acostumbrado a vuelos tan largos ya que siempre me muevo
por Europa.
CRM: ¿Cuántos años hace que se dedica en exclusiva a las
noticias vaticanas?
Mantecole: Empecé de muy jovencito. Mi padre
tenía un cargo diplomático en la época del beato Pablo VI. Allí conocí al Papa
y me quedé en Roma. Conozco de pe a pa la Santa Sede.
CRM: ¿Qué diferencia a Francisco de los otros papas?
Mantecole: No me haga comparar, yo sé que han
sido todos santos. Quizás Francisco sea el que ha tenido mayor oposición por
parte de los conservadores y ultras que se han organizado para atacarlo. Hay un
prejuicio contra él, quizás no soporten su idiosincrasia. Creo que no toleran
su libertad.
CRM: ¿Su libertad?
Mantecole: En efecto. Usted sabe que Bergoglio
es un gran admirador de Borges. Y como el célebre escritor, sabe sacar de su boite-a-surprises alguna cosa
sorprendente cada día. Eso no lo toleran los rígidos pelagianos enmohecidos.
CRM: ¿Y Usted no cree que Bergoglio podría ser un personaje de
Borges?
Mantecole: Interesante…pero creo que hasta
Bergoglio es demasiado imprevisible para Borges.
CRM: Sin embargo, Borges planteó en sus cuentos una serie de
absurdos para justificar sus blasfemias, como cuando le hace decir a un
personaje llamado Buckley –porque él no se atreve- que Cristo es un impostor…Si
inventó eso, ¿por qué no podría haber inventado un hombre que se llama
“Francisco” y que una vez en Roma lleva a cabo la “teología” borgeana de Babel?
¿No pudo haber representado Borges el Aleph en una figura tutelar o un “otro yo”
como Bergoglio? ¿No pudo ser otra forma de su «mise en abyme»?
Mantecole: Un momento, tengo una llamada a mi
celular…
CRM: ¿Quizás Nils Runenberg haya inspirado a Jorge Mario Bergoglio?
Mantecole: Vea, tengo que marcharme. La
entrevista no puede continuar. Nos hemos excedido del tiempo acordado.
Arrivederci.
El
prestigioso vaticanista se levantó de su ya no tan cómoda butaca en el hall del
Castelao Hotel donde lo entrevistaba,
dio cuatro zancadas olímpicas y salió a la Avenida Mitre, por donde desapareció
más rápidamente que la sombra de un gorrión. Me dejó en el garguero unas
cuantas preguntas de candente actualidad. En fin, habrá que esperar a su
próxima visita para continuar tan sabrosa charla.
Ejemplar de
colección.