“El Papa Bergoglio
tiene la infalible habilidad de retratarse cuando hostiga, sólo habla de sí y
consigo. Estamos ante un autorretrato espiritual involuntario: “terrorismo de
las habladurías”, “murmuración asesina”, “esquizofrenia existencial”,
“Alzheimer espiritual”, “narcisismo”, son sus autodiagnósticos, en un juego de
espejos que no puede percibir, característica típica de personajes enfermos y
peligrosos.”
De acá.
De acá.